sábado, 28 de abril de 2012

Esos cuentos sobre la vida

De pequeños vemos la vida de color rosa: todos los cuentos y las películas acaban con final feliz, todas somos pequeñas princesas que sueñan con encontrar a su príncipe azul o en su defecto una rana a la cual besemos y se convierta en el hombre de nuestros sueños. Con el paso del tiempo creemos que se cumplirá pero siempre llega la primera desilusión. Entonces pensamos que nunca habrá una historia con final feliz. Crecemos y cada vez nos volvemos más negativos, más reacios a dejar que nuestros sentimientos fluyan. No decimos un "me gustas" por miedo, por vergüenza, por no se sabe qué. Cuando para un niño tanto eso como un "te quiero" son las cosas más normales del mundo. Muchas veces nos quedamos con la duda de ¿y si...?: y si le hubiera dicho algo, y si hubiera hecho algo... ¿y si?...
Estas dos palabras, por sí mismas no suponen ninguna amenaza, pero si las juntamos una al lado de la otra podrían atormentarnos el resto de nuestra vida.
Si crees que una historia puede llegar a ser lo suficiente importante, nunca es demasiado tarde para volver atrás y rectificar, o para dar un paso adelante.
Únicamente nos falta valor para seguir a nuestros corazones.
Creo, sinceramente, que todos deberíamos dejarnos llevar por nuestras emociones alguna vez, sonreír más a la gente y a la vida. El mundo nos lo acabaría agradeciendo. Nosotros mismos, en nuestro interior, estaríamos agradecidos.
Porque no todas las historias van a terminar mal, siempre encontraremos al menos una con un final feliz.


jueves, 26 de abril de 2012

Un pequeño secreto...



Para ser feliz no tiene que ser toda la vida perfecta, puede que consista en unir varias pequeñas cosas. Hay que hacer que eso sea lo que más cuente. Quizá solo sobrevivimos, y es cuanto podemos pedir...

lunes, 23 de abril de 2012

Cosas de la vida

La clave está en no dejar que los malos momentos se impongan. No es fácil, claro está, pero aunque el camino sea duro, no debemos perdernos en la autocompasión. Hay que seguir adelante. Rodearse de personas que te apoyen y creer en un mañana más feliz...


Pequeñas variaciones



Esas pequeñas cosas que nos hacen felices. Las de siempre y las nuevas que descubrimos día a día.

Cada persona tendrá predilección por unas o por otras, y con el paso del tiempo descubrirá que quizás estás permanezcan o varíen. Que la televisión se ha sustituido por los libros, que las guerras se han sustituido por sonrisas, que el fondo en blanco y negro pasa a verse lleno de colores, que algo tan simple como ver llover o caerse una hoja de un árbol llegue a emocionar. Que nos demos cuenta de que las sensaciones que percibimos están cargadas de significados.


La música, los animales, los libros, los helados de limón, el cine, el olor de las rosas, los colores, el café con leche, la amistad, el té con menta, el respeto, sentarme en medio del campo y mirar las nubes, el mar, las miradas, las sorpresas, las caricias, descubrir nuevas canciones, hablar, la tabla de surf, el baile, las fotos, la fruta, cantar, la playa, reír...

La de siempre, lo de siempre, y las pequeñas variaciones de cada día...